Ngue entra u ve a un hombre con bata blanca maniobrando botones, todo su pueblo estaba en tubos con agua similares a de los que quitara a Ire. Toca un botón y dice sin darse vuelta.
- No, estoy tan cerca, no deben.
La puerta a sus espaldas se cierra dejando a Afefe fuera que comienza a golpearla. Tubos salen del suelo y comienzan a atacar a Ngué con balas, pero Ire los destruye fácilmente con los rayos que le brotan de los dedos.
- No lo permitiré, no entienden los importante de todo esto.
Ngué rebota de su lado y ve como Ire es atrapada por una mano metálica que surge del suelo y la deja inconciente.
El hombre se da vuelta, su rostro reflejaba locura. Ves como revisa que la sangre fuera llevada bien por tubos a un gran tubo central, los tuyos están sufriendo. Te arrojas sobre la consola que estaba manejando y explota.
- No, alto. Dice el científico.- No esperas reacción y re le arrojas encima, un gran zarpaso lo hace volar en giros por el aire y caer lejos.
- Detente.-Dice sin darse vuelta.- No comprendes el experimento.
Y al darse vuelta lo ves, no era humano, con la piel rasgada por tus garras en ves de mostrar hueso mostraban metal. Allí lo sabes, estas perdido. Ire te explico de estas criaturas, no eran humanas aunque lo parecieran y el atacarlas era como atacar armaduras vivas, no tenían órganos y no importa donde lo atacaras no lo debilitarías de forma especial. El estira su brazo de forma increíble y su mano se convierte en una gran garra lastimándote, pero tú tomas el brazo y lo arrojas contra la pared.
- No alto, detente.
Te grita pero tu liberas a Ire, se despierta pero esta aturdida. Vuelve a golpearte, esta ves con la mano abierta y te ingecta literalmente contra la pared. Miras ligeramente a tu gente, muchos de ellos muertos como si hubieran explotado, alguno de ellos agonizando.
- Mira, mira, esa energía es la que necesito.- Retira su mano y te dice.-
- Te ofrezco una vida inmortal, no hace falta que luchemos.- Lo miras y Ngué responde
- Tu no estas vivo, tu eres menos que medio vivo tu eres una cosa.
Se mira los brazos y grita.
- Calla, yo estoy vivo y ellos me darán su sangre Jajajaajajajajajajajaajaj.- Su riza histérica lo confirmo, aquella cosa había perdido la razón.
Tomándote con la mano comienza a estrujarte pero Ire reacciona y le arroja un conjuro que explota con fuego y lo arroja lejos. Tu vas al panel de control y comienzas a tocar todos los botones???? aquellos muertos estaban cambiando, se estaban convirtiendo en So.
Te vuelve a golpear con sus garras pero logras mantener el equilibrio y viendo el panel recuerdas el ves el botón que deduces que abre la puerta, lo aprietas y Afefe entra, la lucha se vuelve muy cruenta.
- Ire, abre los paneles y los que puedan caminar lleven a los que no, ella habré los paneles pero queda paralizada. Le repites las órdenes a los que bajaban de allí aturdidos y se llevaron a los nuevos So.
- Ire vete.- Ella no se mueve.
- Vete tu cachorro, yo lo ententendre, llévate a tu hembra.
- No te dejare solo aquí.
- No seas entupido, no hagas que esto sea en vano, yo ya soy viejo y mi tiempo se cumple.
Ngué pierde el control y se arroja hacia aquella mounstrocidad, Afefe trata de alejarlo pero solo recibe un golpe del mounstro.
Ire esta aturdida y dice
- ¿Donde esta lucien? ? Ella busca y solo ve un laboratorio de investigación genética
Cae de rodillas y se toma la cabeza, recuerda a Lucien, recuerda cuando teniendo hijos y a Lucien a su lado. Nguè la toma y comienza a correr, al parecer la bestia pensó en algo y desapareció antes de matarlos.
Todos corren y se arrojan a las alcantarillas ya que en la ciudad hay una gran conmoción y la bestia mandaba sobre muertos ? vivientes para que los atacasen, en su aturdimiento ella derrumba con sus poderes el túnel para que no los sigan. El resto del viaje es tranquilo y llegan al campamento.
Off Rol: Cambie algunas cosas y espero sus criticas para que las corrijan si ustedes las creen mal echas
Ascedio a la ciudad Negra II Ngüe - Ire
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- andyfaith73
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Re: Ascedio a la ciudad Negra II Ngüe - Ire
Iré
Un hombre que viste una bata blanca me ataca, no entiendo por qué, las imágenes de otras cosas se mezclan con las de ahora. Una mano metálica sale del suelo y me atrapa. Forcejeo pero no es fácil.
Es lo último que escucho, la mano aprieta tanto que no puedo respirar... quedo inconciente por un tiempo. Cuando despierto, pequeños puntitos blancos danzan delante de mis ojos.
-¿Qué...?
Alguien me liberta, es él, el que se hace llamar Ngüé y que para mi... "tengo que protegerlo" pienso aunque no sé por qué, aún no conecto toda esta situación. Pero la idea es fuerte, no es un comando, es un instinto, una certeza...
-¡Bola de Fuegoooo!- y el hechizo sale con fuerza, con gloria, me sorprende incluso.
Me miro las manos pensando de dónde sale todo esto tan naturalmente, como si nunca lo hubiese dejado de hacer.
¿Lucien? ¿Dónde estás? no creo que puedo moverme, no entiendo nada. De pronto fue tan fácil mi ataque ahora necesito a mi amado aunque... Ngüé... es alguien para mí?
-¿Cómo? ¿Donde esta lucien? Las piernas se me doblan y caigo, no sé que pasa alrededor. Pienso en Lucien, en mi hijo, hijos... había hijos... sé que había... No puedo... no puedo moverme... ¿dónde está él?
Me tomo la cabeza
¿Ha muerto?
Un hombre que viste una bata blanca me ataca, no entiendo por qué, las imágenes de otras cosas se mezclan con las de ahora. Una mano metálica sale del suelo y me atrapa. Forcejeo pero no es fácil.
- No lo permitiré, no entienden los importante de todo esto.
Es lo último que escucho, la mano aprieta tanto que no puedo respirar... quedo inconciente por un tiempo. Cuando despierto, pequeños puntitos blancos danzan delante de mis ojos.
-¿Qué...?
Alguien me liberta, es él, el que se hace llamar Ngüé y que para mi... "tengo que protegerlo" pienso aunque no sé por qué, aún no conecto toda esta situación. Pero la idea es fuerte, no es un comando, es un instinto, una certeza...
dice el loco que ahora no tiene forma humana, eso me hace reaccionar. Estiro mis brazos y realizo con gran audacia y facilidad un conjuro que explota con fuego.- Calla, yo estoy vivo y ellos me darán su sangre Jajajaajajajajajajajaajaj.-
-¡Bola de Fuegoooo!- y el hechizo sale con fuerza, con gloria, me sorprende incluso.
Me miro las manos pensando de dónde sale todo esto tan naturalmente, como si nunca lo hubiese dejado de hacer.
Ire, abre los paneles y los que puedan caminar lleven a los que no, ella habré los paneles
¿Lucien? ¿Dónde estás? no creo que puedo moverme, no entiendo nada. De pronto fue tan fácil mi ataque ahora necesito a mi amado aunque... Ngüé... es alguien para mí?
- Ire vete.-
-¿Cómo? ¿Donde esta lucien? Las piernas se me doblan y caigo, no sé que pasa alrededor. Pienso en Lucien, en mi hijo, hijos... había hijos... sé que había... No puedo... no puedo moverme... ¿dónde está él?
Me tomo la cabeza
¿Ha muerto?
Re: Ascedio a la ciudad Negra II Ngüe - Ire
Ngué
Por fin habían logrado escapar de aquel lugar con su gente. Esperaba que los So a los que había mandado el mensaje por el cuervo de Iré hubieran aprovechado el escándalo para escapar, si no era así ya no tendría una nueva oportunidad, al menos no hasta dentro de mucho tiempo. Su cuerpo se hallaba mancillado por los ataques sufridos por el hombre metálico. Sus garras le dolían al igual que sus múltiples heridas. Dejó su forma híbrida al abandonar las alcantarillas y mientras Iré y el resto huían hacia el campamento, adoptó su forma animal y esperó entre las sombras. Si alguien había decidido seguirlos el se encargaría de despistarlos.
Por fin habían logrado escapar de aquel lugar con su gente. Esperaba que los So a los que había mandado el mensaje por el cuervo de Iré hubieran aprovechado el escándalo para escapar, si no era así ya no tendría una nueva oportunidad, al menos no hasta dentro de mucho tiempo. Su cuerpo se hallaba mancillado por los ataques sufridos por el hombre metálico. Sus garras le dolían al igual que sus múltiples heridas. Dejó su forma híbrida al abandonar las alcantarillas y mientras Iré y el resto huían hacia el campamento, adoptó su forma animal y esperó entre las sombras. Si alguien había decidido seguirlos el se encargaría de despistarlos.
Re: Ascedio a la ciudad Negra II Ngüe - Ire
Ire
Te rodean genes extrañas de piel negra igual que aquel que te sacara del laboratorio. Estabas acompañada por muchos So, aunque parecían gente libre. Te trataban de forma familiar, no entendías porque, algunas te llamaban ?la mujer de Ngué? cosa que te mareaba más. Recuerdas levemente cuando Lucien te anuncia que ibas a ser madre, que inocentes aquellos momentos, pero siempre el mismos sino te dije, la muerte y la guerra. Tu cuervo viene rápidamente y dice ?nos han seguido y tienen acorralado a Ngué?.
Afefe, la pantera dice
- Yo se donde llevarlos, los llevare al norte, aquel elfo nos dará refugio.
Un elfo dando refugio, será alguno de aquellos que tu amado ayudara, seguro que si. En una voz imperativa dices.
- Tu guía al resto, todos tomen lo indispensable y carguen a los niños, yo les daré el tiempo necesario para escapar.
Comienza a correr hacia donde estaba Nguè y algo en tu mente te frena, una promesa en dicha en aquel momento que estabas embarazada.
- ¿Prométeme que no lucharas, podrías dañar a nuestro niño?- Dice Lucien. Lo vez, quieres abrazarlo, pero solo era un recuerdo.
Ahora no hay niño, no hay embarazo, no hay nada. Lloras, pero debes de tomar una decisión, adaptarte a tu nueva situación o seguir llorando por algo que no sabes hace cuanto tiempo paso. Luecien muerto??. Y lloras profundamente.
Ngué
Te quedas agazapado esperando algo y ese algo aparece. Una gran mosca de metal volando aparece silenciosa como buscando algo, ella no tiene forma de reaccionar y la destruyes. Tus músculos te duelen pero te sobrepones. Aquel cuervo aparece solo para ver como mas de aquellas moscas comienzan a aparecer y las bajas de un zarpaso sin problema, el cuervo huye. Son cada vez mas y si sigues allí te acorralaran. Ves como de su boca comienzan a emerger púas que ruedan, una de ellas te da y sientes gran dolor.
¿Qué harás, te quedas a pelear o escapas a un mejor campo de batalla o simplemente te ocultas nuevamente para poder vivir un día mas?
Te rodean genes extrañas de piel negra igual que aquel que te sacara del laboratorio. Estabas acompañada por muchos So, aunque parecían gente libre. Te trataban de forma familiar, no entendías porque, algunas te llamaban ?la mujer de Ngué? cosa que te mareaba más. Recuerdas levemente cuando Lucien te anuncia que ibas a ser madre, que inocentes aquellos momentos, pero siempre el mismos sino te dije, la muerte y la guerra. Tu cuervo viene rápidamente y dice ?nos han seguido y tienen acorralado a Ngué?.
Afefe, la pantera dice
- Yo se donde llevarlos, los llevare al norte, aquel elfo nos dará refugio.
Un elfo dando refugio, será alguno de aquellos que tu amado ayudara, seguro que si. En una voz imperativa dices.
- Tu guía al resto, todos tomen lo indispensable y carguen a los niños, yo les daré el tiempo necesario para escapar.
Comienza a correr hacia donde estaba Nguè y algo en tu mente te frena, una promesa en dicha en aquel momento que estabas embarazada.
- ¿Prométeme que no lucharas, podrías dañar a nuestro niño?- Dice Lucien. Lo vez, quieres abrazarlo, pero solo era un recuerdo.
Ahora no hay niño, no hay embarazo, no hay nada. Lloras, pero debes de tomar una decisión, adaptarte a tu nueva situación o seguir llorando por algo que no sabes hace cuanto tiempo paso. Luecien muerto??. Y lloras profundamente.
Ngué
Te quedas agazapado esperando algo y ese algo aparece. Una gran mosca de metal volando aparece silenciosa como buscando algo, ella no tiene forma de reaccionar y la destruyes. Tus músculos te duelen pero te sobrepones. Aquel cuervo aparece solo para ver como mas de aquellas moscas comienzan a aparecer y las bajas de un zarpaso sin problema, el cuervo huye. Son cada vez mas y si sigues allí te acorralaran. Ves como de su boca comienzan a emerger púas que ruedan, una de ellas te da y sientes gran dolor.
¿Qué harás, te quedas a pelear o escapas a un mejor campo de batalla o simplemente te ocultas nuevamente para poder vivir un día mas?
Ven y elevate como el humo y se feliz
Re: Ascedio a la ciudad Negra II Ngüe - Ire
Ngué
Como esperaba los habían seguido. Había imaginado que llegarían muertos, magos y soldados. Sin embargo lo que vino tras de si eran una especie de moscas. Eran débiles pero a medida que comenzó a crecer su número también lo hacía su fuerza. El hombre convertido en felino y decidido a darle tiempo a su gente corrió procurando un paso lo suficientemente lento para ser seguido de serca, pero manteniendo la suficiente distancia para que aquellos insectos no pudieran atacarle. Correría por varios minutos alejándose de la posición donde se encontraba su gente. Luego evaluaría si era conveniente un combate o si era preferible huir y recuperarse.
Como esperaba los habían seguido. Había imaginado que llegarían muertos, magos y soldados. Sin embargo lo que vino tras de si eran una especie de moscas. Eran débiles pero a medida que comenzó a crecer su número también lo hacía su fuerza. El hombre convertido en felino y decidido a darle tiempo a su gente corrió procurando un paso lo suficientemente lento para ser seguido de serca, pero manteniendo la suficiente distancia para que aquellos insectos no pudieran atacarle. Correría por varios minutos alejándose de la posición donde se encontraba su gente. Luego evaluaría si era conveniente un combate o si era preferible huir y recuperarse.
- andyfaith73
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Re: Ascedio a la ciudad Negra II Ngüe - Ire
Iré
Gentes extrañas de pieles oscuras me rodean, muchas de estas criaturas son So pero están libres, se refieren a mí en palabras extrañas "La mujer de Ngué" cuando siempre he sido la esposa de Lucien. Quiero aclararles eso pero hay algo que me lo impide: sé que dicen la verdad. No recuerdo mucho pero sé que Lucien no está más aquí... en mi alma hay algo que me lo confirma. En ese momento mi cuervo, el ser que Lucien trajo aquel día en su camión aparece. Sus palabras hacen que reaccione.
La pantera nos guía hacia el norte. Se llama Afeté, yo ya sé eso. Poco a poco la memoria va volviendo, como pequeños pedazos que encajan en su sitio. Sólo espero que me guste la imagen final. Llegamos hasta lo de un elfo, pero esta criatura no es como aquellos que me mantenían cautiva, él está ayudando. Es hora de actuar.
- Tu guía al resto, todos tomen lo indispensable y carguen a los niños, yo les daré el tiempo necesario para escapar.
Mis piernas toman velocidad, el cabello se rebela frente al viento que el propio trotar provoca, entonces recuerdo la promesa de aquel que amé con todo el corazón.
Digo mentalmente a mi querido Lucien, mi ángel que tal vez pueda cuidarme desde algún lugar.
"Debes comprender que hago lo correcto"... Voy presurosa a salvar a Ngué y, cuando lo veo, me detengo. Moscas extrañas lo están atacando. Cada vez más y más. Pienso en que conjuro puedo usar en esta situación y, sobre todo, en no dañar al hombre. Elijo un poder que era fácil para mí en otro tiempo, cuando aún estaba bajo el dominio de los elfos. Pongo las manos delante de mi pecho e invoco una bola de energía, pero hago que esta cambie su poder por frío. Tengo la impresión que quizá eso haga que las mocas tengan bastantes más problemas para atacar, lo que me dé el suficiente tiempo para sacar al muchacho de allí.
OF=> tyr, ese es un hechizo que tiene iré en su hoja llamado Sustitución de Energía (Frío)te permite cambiar la energía de los hechizos por frío por ejemplo hacer que una bola de fuego haga daño por frio que un orbe de ácido haga daño por frio tenes que avisar que usas la sustitucion cuando lo lanzas sino se lanza normal. Si no se puede hacer avisame.
Gentes extrañas de pieles oscuras me rodean, muchas de estas criaturas son So pero están libres, se refieren a mí en palabras extrañas "La mujer de Ngué" cuando siempre he sido la esposa de Lucien. Quiero aclararles eso pero hay algo que me lo impide: sé que dicen la verdad. No recuerdo mucho pero sé que Lucien no está más aquí... en mi alma hay algo que me lo confirma. En ese momento mi cuervo, el ser que Lucien trajo aquel día en su camión aparece. Sus palabras hacen que reaccione.
?nos han seguido y tienen acorralado a Ngué?.
La pantera nos guía hacia el norte. Se llama Afeté, yo ya sé eso. Poco a poco la memoria va volviendo, como pequeños pedazos que encajan en su sitio. Sólo espero que me guste la imagen final. Llegamos hasta lo de un elfo, pero esta criatura no es como aquellos que me mantenían cautiva, él está ayudando. Es hora de actuar.
- Tu guía al resto, todos tomen lo indispensable y carguen a los niños, yo les daré el tiempo necesario para escapar.
Mis piernas toman velocidad, el cabello se rebela frente al viento que el propio trotar provoca, entonces recuerdo la promesa de aquel que amé con todo el corazón.
Las lágrimas caen pero yo sigo corriendo, tengo que salvarlo, sé que tengo que...¿Prométeme que no lucharas, podrías dañar a nuestro niño?-
Digo mentalmente a mi querido Lucien, mi ángel que tal vez pueda cuidarme desde algún lugar.
"Debes comprender que hago lo correcto"... Voy presurosa a salvar a Ngué y, cuando lo veo, me detengo. Moscas extrañas lo están atacando. Cada vez más y más. Pienso en que conjuro puedo usar en esta situación y, sobre todo, en no dañar al hombre. Elijo un poder que era fácil para mí en otro tiempo, cuando aún estaba bajo el dominio de los elfos. Pongo las manos delante de mi pecho e invoco una bola de energía, pero hago que esta cambie su poder por frío. Tengo la impresión que quizá eso haga que las mocas tengan bastantes más problemas para atacar, lo que me dé el suficiente tiempo para sacar al muchacho de allí.
OF=> tyr, ese es un hechizo que tiene iré en su hoja llamado Sustitución de Energía (Frío)te permite cambiar la energía de los hechizos por frío por ejemplo hacer que una bola de fuego haga daño por frio que un orbe de ácido haga daño por frio tenes que avisar que usas la sustitucion cuando lo lanzas sino se lanza normal. Si no se puede hacer avisame.
La muerte de una pantera
Ves a Ire rápidamente llega a tu ayuda, tu vida esta salvada. La notas algo perturbada, eso no es bueno. A tu derecha estaba la muerte, todo se había paralizado.
- Sabes a lo que vengo.
- Si, lo se. Pero ¿Quesera de mi pueblo?
- No lo se, aquella mujer los tiene ahora en sus manos.
- De esa mujer, pero ni siquiera esta en sus cabales.
- Eso es verdad, ella tiene su búsqueda en otro lado, pero seguramente tomara lo que tu dejes.
- ¿Crees que le ira bien?
- No lo se.
- Tu no quieres decirme no.
- No, no debo decirte.
Se hace una pausa.
- ¿Dolerá?
- Sentirás frío.
- Sabes a lo que vengo.
- Si, lo se. Pero ¿Quesera de mi pueblo?
- No lo se, aquella mujer los tiene ahora en sus manos.
- De esa mujer, pero ni siquiera esta en sus cabales.
- Eso es verdad, ella tiene su búsqueda en otro lado, pero seguramente tomara lo que tu dejes.
- ¿Crees que le ira bien?
- No lo se.
- Tu no quieres decirme no.
- No, no debo decirte.
Se hace una pausa.
- ¿Dolerá?
- Sentirás frío.
Ven y elevate como el humo y se feliz
Re: Ascedio a la ciudad Negra II Ngüe - Ire
Ire
Lanzas la bola de hielo, ciertamente matas las moscas pero no calculas bien el golpe y al estallar aquellos enormes moscardones de hierro hieren a Ire, pero sus esquirlas metálicas golpean una estatua de madera. La revisas y ves a Ngue convertido en madera. En tu mente resurge un recuerdo que dice que algunos So, los mas poderosos se convierten en roca o madera cuando mueren, algunos en arena, sal, agua o diferentes materiales, pero solo los realmente poderoso en cosas importantes como aquel que fue llamado ?Tu hombre?. Le quitas las esquirlas y lo limpias bien. Ves que aquella estatua ya era parte de la tierra como un árbol con forma. Le besas la frente y lloras. Será por esto que Lucien no quería que lucharas, porque pondrías en a otro en peligro.
A lo lejos escuchas un helicóptero que se acerca, rápidamente corres a la espesura lejos de allí, en que dirección, no lo sabes.
Finalmente llegas a unas ruinas que te resultan familiares y luego captas lo que ocurre, esas ruinas son lo que fueron tu prisión hace tantos años. Solo queda un hueco y algunos edificios derruidos, ninguna entrada. Ahora te debates entre continuar con tu vida o ir con aquel elfo que te dijo la pantera.
El rey a muerto, que viva el rey
Lanzas la bola de hielo, ciertamente matas las moscas pero no calculas bien el golpe y al estallar aquellos enormes moscardones de hierro hieren a Ire, pero sus esquirlas metálicas golpean una estatua de madera. La revisas y ves a Ngue convertido en madera. En tu mente resurge un recuerdo que dice que algunos So, los mas poderosos se convierten en roca o madera cuando mueren, algunos en arena, sal, agua o diferentes materiales, pero solo los realmente poderoso en cosas importantes como aquel que fue llamado ?Tu hombre?. Le quitas las esquirlas y lo limpias bien. Ves que aquella estatua ya era parte de la tierra como un árbol con forma. Le besas la frente y lloras. Será por esto que Lucien no quería que lucharas, porque pondrías en a otro en peligro.
A lo lejos escuchas un helicóptero que se acerca, rápidamente corres a la espesura lejos de allí, en que dirección, no lo sabes.
Finalmente llegas a unas ruinas que te resultan familiares y luego captas lo que ocurre, esas ruinas son lo que fueron tu prisión hace tantos años. Solo queda un hueco y algunos edificios derruidos, ninguna entrada. Ahora te debates entre continuar con tu vida o ir con aquel elfo que te dijo la pantera.
El rey a muerto, que viva el rey
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- andyfaith73
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Re: Ascedio a la ciudad Negra II Ngüe - Ire
Iré
El hechizo logra acabar con las moscas, todas ellas se caen, se desintegran ante la bola de frío. Pero también lastima a Ngüé. Lo veo convertido en una estatua de madera. La toco, sé de historias sobre los So, que se convierten en piedra o madera cuando mueren. Sólo los más poderosos hacen eso. Recuerdo también la promesa que hice a Lucien.
¿Podría él saber que mi magia causaría más mal que bien? Me llevo la mano a la cabeza, subo la otra. No puedo creer lo que he hecho...
Quito las esquirlas con cuidado de aquél que seguramente quise también. Las lágrimas ya no se detienen, he perdido todo lo que importa. No serví nunca para nada. Beso su frente y me voy, antes le digo:
-Ya no fallaré a nadie más... ya no.
Un helicóptero se acerca. Huyo, mis piernas siguen tan veloces como siempre lo fueron. Mientras corro, recuerdo el día en que me dolieron, el día en que esos niños salieron de mí. Los presentes se mezclan se mezclan con los pasados. Llego a unas ruinas y me meto adentro. No siento nada, simplemente frío que me sube desde los pies hasta el cabello. De pronto reconozco el lugar, es el golpe final para mi cordura... es la prisión... aquella en la que era Beta Ocho... hace tanto tiempo ya.
"¿Cuánto tiempo ya?"- pienso y me llevo el dedo a la sien. La froto pero la sensación no termina... no es dolor, es abatimiento. Ni siquiera sé que es. Creo que estoy vacía. Me debato entre continuar con mi vida o ir a ver al elfo. Entonces entiendo, sé que es lo que me dejará ser feliz o, al menos, dejar de sentirme así.
Pongo ambas manos sobre mi vientre... cierro los ojos y pienso en el hechizo que hice y que mató a Ngüé.
-Perdóname, Lucien... no he cumplido ninguna de mis promesas...
Y saco la bola de frío para terminar con mi propia vida.
OF=> uds saben que yo pongo el roleo ante todo, con todo lo que vivió Iré, esto y sólo ésto es lo que a mí, poniéndome en su lugar se me ocurre.
El hechizo logra acabar con las moscas, todas ellas se caen, se desintegran ante la bola de frío. Pero también lastima a Ngüé. Lo veo convertido en una estatua de madera. La toco, sé de historias sobre los So, que se convierten en piedra o madera cuando mueren. Sólo los más poderosos hacen eso. Recuerdo también la promesa que hice a Lucien.
¿Podría él saber que mi magia causaría más mal que bien? Me llevo la mano a la cabeza, subo la otra. No puedo creer lo que he hecho...
Quito las esquirlas con cuidado de aquél que seguramente quise también. Las lágrimas ya no se detienen, he perdido todo lo que importa. No serví nunca para nada. Beso su frente y me voy, antes le digo:
-Ya no fallaré a nadie más... ya no.
Un helicóptero se acerca. Huyo, mis piernas siguen tan veloces como siempre lo fueron. Mientras corro, recuerdo el día en que me dolieron, el día en que esos niños salieron de mí. Los presentes se mezclan se mezclan con los pasados. Llego a unas ruinas y me meto adentro. No siento nada, simplemente frío que me sube desde los pies hasta el cabello. De pronto reconozco el lugar, es el golpe final para mi cordura... es la prisión... aquella en la que era Beta Ocho... hace tanto tiempo ya.
"¿Cuánto tiempo ya?"- pienso y me llevo el dedo a la sien. La froto pero la sensación no termina... no es dolor, es abatimiento. Ni siquiera sé que es. Creo que estoy vacía. Me debato entre continuar con mi vida o ir a ver al elfo. Entonces entiendo, sé que es lo que me dejará ser feliz o, al menos, dejar de sentirme así.
Pongo ambas manos sobre mi vientre... cierro los ojos y pienso en el hechizo que hice y que mató a Ngüé.
-Perdóname, Lucien... no he cumplido ninguna de mis promesas...
Y saco la bola de frío para terminar con mi propia vida.
OF=> uds saben que yo pongo el roleo ante todo, con todo lo que vivió Iré, esto y sólo ésto es lo que a mí, poniéndome en su lugar se me ocurre.
Re: Ascedio a la ciudad Negra II Ngüe - Ire
El rey y la reina han muerto, el mundo a perdido su luz.
Ven y elevate como el humo y se feliz