Forja de una espada II
Moderador: Tyr
Re: Forja de una espada II
AXWELL ISSEN
Gracias a las frutas mágicas, Telsius pudo continuar el viaje sin problemas. Pero mientras volábamos hacia el lugar de los demoñillos, nos encontramos con una extraña ave, que decía venir enviada por el sacerdote.
Bien, tu ayuda será bien recibida. Vamos en dirección a un bosque en el que abunda el acero primigenio. Necesitamos encontrar una serie de ingredientes para forjar una nueva espada... ¿qué ha sido de la espada de mi padre? le pregunté al ave.
Luego descenderíamos hasta el lugar indicado por Dheimus, y buscaríamos el preciado metal.
Gracias a las frutas mágicas, Telsius pudo continuar el viaje sin problemas. Pero mientras volábamos hacia el lugar de los demoñillos, nos encontramos con una extraña ave, que decía venir enviada por el sacerdote.
Bien, tu ayuda será bien recibida. Vamos en dirección a un bosque en el que abunda el acero primigenio. Necesitamos encontrar una serie de ingredientes para forjar una nueva espada... ¿qué ha sido de la espada de mi padre? le pregunté al ave.
Luego descenderíamos hasta el lugar indicado por Dheimus, y buscaríamos el preciado metal.
Re: Forja de una espada II
El águila responde.
- La espada de tu padre y su armadura ahora la tiene tu madre que esta al frente del ejercito defendiendo la ciudad del asedio, pero hay un nuevo aliado que consiguió tu padre con su muerte, un dragón muy parecido a un humano y gigantesco. Esto da moral, pero el mensaje es que no es suficiente, la moral esta bajando porque no hay rey mi señor. Yo no se de aceros y demás cosas, lo siento mi señor, pero en aquello no puedo ayudarte.
Sigues el viaje con el águila volando a tu alrededor y vuelves a la montaña de donde vino Khalid.
El te indica el camino por entre una gran grieta donde se veía un templo tallado en la misma roca. La construcción tenia muchas cúpulas de oro y mármol y con las puntas que aprecian brillar como el diamante.
El lugar era silencioso, no corría ni el aire ni ningún sonido parecía querer darse, mas que un templo parecía una tumba. Subes por las escalinatas pero instintivament3e le dices a los niños y al águila que se quedaran atrás, avanzas con Vikina a tu lado no porque no la hubieses querido dejar, sino porque cuando fuiste a nombrarla la mirada que te regalo daba tanta decisión de acompañarte que no quisiste comenzar una discusión.
La greda y el polvillo cubrían el piso de aquel lugar la falta de corrientes de aire daban sensación de opresión. Avanzaste hacia aquel lugar, Vikina parecía no notarlo pero el lugar olia a muerte???????..
Necesito una formación para un posible combate, como entras y que es lo que les pides a los que se quedan afueras y cosas similares.
- La espada de tu padre y su armadura ahora la tiene tu madre que esta al frente del ejercito defendiendo la ciudad del asedio, pero hay un nuevo aliado que consiguió tu padre con su muerte, un dragón muy parecido a un humano y gigantesco. Esto da moral, pero el mensaje es que no es suficiente, la moral esta bajando porque no hay rey mi señor. Yo no se de aceros y demás cosas, lo siento mi señor, pero en aquello no puedo ayudarte.
Sigues el viaje con el águila volando a tu alrededor y vuelves a la montaña de donde vino Khalid.
El te indica el camino por entre una gran grieta donde se veía un templo tallado en la misma roca. La construcción tenia muchas cúpulas de oro y mármol y con las puntas que aprecian brillar como el diamante.
El lugar era silencioso, no corría ni el aire ni ningún sonido parecía querer darse, mas que un templo parecía una tumba. Subes por las escalinatas pero instintivament3e le dices a los niños y al águila que se quedaran atrás, avanzas con Vikina a tu lado no porque no la hubieses querido dejar, sino porque cuando fuiste a nombrarla la mirada que te regalo daba tanta decisión de acompañarte que no quisiste comenzar una discusión.
La greda y el polvillo cubrían el piso de aquel lugar la falta de corrientes de aire daban sensación de opresión. Avanzaste hacia aquel lugar, Vikina parecía no notarlo pero el lugar olia a muerte???????..
Necesito una formación para un posible combate, como entras y que es lo que les pides a los que se quedan afueras y cosas similares.
Ven y elevate como el humo y se feliz
Re: Forja de una espada II
AXWELL ISSEN
El águila parecía ser una aliada de confianza, así como el dragón del que hablaba. Sería necesaria mi presencia para devolver la moral a las tropas, pero en esos momentos no podía dejar mi búsqueda.
Regresa con el sacerdote y dile que contengan las defensas hasta que regrese. Que no inicien ninguna ofensiva contra los Sha, sólo permanecen bajo la seguridad de los muros y repeled sus acometidas. le dije al águila.
Poco después llegamos al lugar indicado por Khalid, una lúgubre cueva en la que se hallaba construído un templo de excelente construcción. El oro y el marfil relucían cual diamantes, y la tranquilidad era total.
Demasiada tranquilidad quizás. Ordené a Dheimus y Khalid que aguardaran junto a Telsius, pero Vikina parecía demasiado entusiasmada en seguirme, así que decidí dejarla acompañarme.
Vigila tus pasos, este lugar huele a muerte... le advertí mientras avanzabamos al interior del edificio.
Rastrearíamos el interior para intentar localizar el acero, y nos iríamos justo lo hubiéramos encontrado.
El águila parecía ser una aliada de confianza, así como el dragón del que hablaba. Sería necesaria mi presencia para devolver la moral a las tropas, pero en esos momentos no podía dejar mi búsqueda.
Regresa con el sacerdote y dile que contengan las defensas hasta que regrese. Que no inicien ninguna ofensiva contra los Sha, sólo permanecen bajo la seguridad de los muros y repeled sus acometidas. le dije al águila.
Poco después llegamos al lugar indicado por Khalid, una lúgubre cueva en la que se hallaba construído un templo de excelente construcción. El oro y el marfil relucían cual diamantes, y la tranquilidad era total.
Demasiada tranquilidad quizás. Ordené a Dheimus y Khalid que aguardaran junto a Telsius, pero Vikina parecía demasiado entusiasmada en seguirme, así que decidí dejarla acompañarme.
Vigila tus pasos, este lugar huele a muerte... le advertí mientras avanzabamos al interior del edificio.
Rastrearíamos el interior para intentar localizar el acero, y nos iríamos justo lo hubiéramos encontrado.
Re: Forja de una espada II
Comienzas a caminar por el templo silencioso, templo o tumba, ya te valía poco lo que fuera cuando encuentras el primer cadáver.
Este estaba seco, sin gota de agua en su cuerpo le viste que le habían cruzado las manos y le habían puesto una moneda de oro en cada ojo y un bollo de pequeñas gemas verdes junto con un par de monedas en la boca. A pesar de haber respetado correctamente los ritos funerarios estaba tirado en el suelo y al revisarla antesala encuentras otros cadáveres igual, algunos sentados, otros acostados, otros apoyados contra la pared. Entras por fin a la sala principal.
En el lugar había muchas columnas y una especie de mirador en el segundo piso, también largas cortinas rojas con símbolos que te eran extraños y un trono, tras el un paredón y puertas laterales. El trono era de oro rojo batido con joyas incrustadas y con un cadáver con extrañas ropas pero sin las monedas ni las gemas. Ese cadáver tenia en la mano un báculo de oro amarillo de aproximadamente un metro rematado en un rubi muy brillante, en su parte superior, y en un diamante esplendoroso en su parte inferior, junto con un conjunto de gemas de exquisitos colores. Parecía vigilar la estanca pero no se movía, no hacia nada, Vikina arrojo una piedrecilla cerca de el pero este ni se inmuto, al parecer, según ellas era mas que un cadáver. Desde donde ves ves que tiene ciertos signos de putrefacción pero también la misma sequedad, como si se hubiera podrido y luego secado. El ulular del viento se hizo sentir como si de ancoro fantasmagoricote tratara pero no era mas que el efecto de los nervios y de unos dispositivos que se veían allí.
En la parte superior, mas alta era en cúpula y en su pared grandes Vitro con símbolos extraños, la habitación estaba muy iluminada, y silenciosa si no tomamos en cuenta el viento.
Este estaba seco, sin gota de agua en su cuerpo le viste que le habían cruzado las manos y le habían puesto una moneda de oro en cada ojo y un bollo de pequeñas gemas verdes junto con un par de monedas en la boca. A pesar de haber respetado correctamente los ritos funerarios estaba tirado en el suelo y al revisarla antesala encuentras otros cadáveres igual, algunos sentados, otros acostados, otros apoyados contra la pared. Entras por fin a la sala principal.
En el lugar había muchas columnas y una especie de mirador en el segundo piso, también largas cortinas rojas con símbolos que te eran extraños y un trono, tras el un paredón y puertas laterales. El trono era de oro rojo batido con joyas incrustadas y con un cadáver con extrañas ropas pero sin las monedas ni las gemas. Ese cadáver tenia en la mano un báculo de oro amarillo de aproximadamente un metro rematado en un rubi muy brillante, en su parte superior, y en un diamante esplendoroso en su parte inferior, junto con un conjunto de gemas de exquisitos colores. Parecía vigilar la estanca pero no se movía, no hacia nada, Vikina arrojo una piedrecilla cerca de el pero este ni se inmuto, al parecer, según ellas era mas que un cadáver. Desde donde ves ves que tiene ciertos signos de putrefacción pero también la misma sequedad, como si se hubiera podrido y luego secado. El ulular del viento se hizo sentir como si de ancoro fantasmagoricote tratara pero no era mas que el efecto de los nervios y de unos dispositivos que se veían allí.
En la parte superior, mas alta era en cúpula y en su pared grandes Vitro con símbolos extraños, la habitación estaba muy iluminada, y silenciosa si no tomamos en cuenta el viento.
Ven y elevate como el humo y se feliz
Re: Forja de una espada II
AXWELL ISSEN
El lugar era siniestro, y no invitaba a pensar que los cadáveres que íbamos encontrando hubieran muerto plácidamente. Alguien les había puesto monedas en los ojos, y tapado la boca con una especie de gemas.
No comprendía que clase de templo era este, pero si una cosa tenía clara es que quería salir de aquí en cuanto antes.
Vikina, no toques nada, puede haber multitud de trampas u objetos malditos. Encontremos el Acero y vayámonos. y seguí registrando la tétrica estancia en busca del preciado metal. El ruido del viento hacía que estubiera algo nervioso, pero intentaba mantener la calma y localizar lo que andaba buscando.
El lugar era siniestro, y no invitaba a pensar que los cadáveres que íbamos encontrando hubieran muerto plácidamente. Alguien les había puesto monedas en los ojos, y tapado la boca con una especie de gemas.
No comprendía que clase de templo era este, pero si una cosa tenía clara es que quería salir de aquí en cuanto antes.
Vikina, no toques nada, puede haber multitud de trampas u objetos malditos. Encontremos el Acero y vayámonos. y seguí registrando la tétrica estancia en busca del preciado metal. El ruido del viento hacía que estubiera algo nervioso, pero intentaba mantener la calma y localizar lo que andaba buscando.
Re: Forja de una espada II
Caminas por aquel lugar maldito de silencio y quietud de tal forma que el sonido de tus pasos repiqueteaba por todo el lugar. Te adentras al complejo del templo. Sigues viendo escenas similares en cadáveres y calculas una gran fortuna en aquellos cuerpos, lo que te llama la atención que muchos estaban con sus posesiones y la mayoría parecían aventureros.
Caminas por un pasillo que a diestra y siniestra hay habitaciones, dormitorios de los monjes, la diferencia de este pasillo diferencia de el resto del templo es que aquí había manchas de sangre y señales de combate, tanto en viejos esqueletos de cuerpos descompuestos como marcas en las paredes, solo con cerrar los ojos te imaginas un combate de leyenda dándose en el lugar contra algún mounstro desconocido que dejaba sus garras marcadas en las paredes como tres surcos. Ves algunos cuerpos aplastados otros cadáver con sus cabezas incrustadas en la piedra. Al fondo del pasillo estaban lo que parecían las cámaras principales, las del sumo sacerdote, dudabas seriamente el transitar por ese pasillo de muerte pero había fuerzas que te guiaban hasta allí, como si todo el templo respirara en aquella dirección.
Caminas por un pasillo que a diestra y siniestra hay habitaciones, dormitorios de los monjes, la diferencia de este pasillo diferencia de el resto del templo es que aquí había manchas de sangre y señales de combate, tanto en viejos esqueletos de cuerpos descompuestos como marcas en las paredes, solo con cerrar los ojos te imaginas un combate de leyenda dándose en el lugar contra algún mounstro desconocido que dejaba sus garras marcadas en las paredes como tres surcos. Ves algunos cuerpos aplastados otros cadáver con sus cabezas incrustadas en la piedra. Al fondo del pasillo estaban lo que parecían las cámaras principales, las del sumo sacerdote, dudabas seriamente el transitar por ese pasillo de muerte pero había fuerzas que te guiaban hasta allí, como si todo el templo respirara en aquella dirección.
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Re: Forja de una espada II
AXWELL ISSEN
El lugar terminó por revelar un largo pasillo en el que habían claras muestras de lucha. Sangre de hacía años, manchaba la pared de un color ya marronáceo oscuro. Y algo así como garras de alguna antigua bestia, se clavaban a uno y otro lado del pasillo, revelando lo que allí había podido pasar. Pero seguía sin entender los muertos en la parte principal, si bien su muerte parecía más bien a causa de algún tipo de magia... ¿Y si se hubieran sacrificado para derrotar a la bestia?
Dejando posibles hipótesis, seguí en dirección a la habitación del sumo sacerdote. Esperaba encontrar el Acero, y por qué no, algunas respuestas de lo sucedido.
El lugar terminó por revelar un largo pasillo en el que habían claras muestras de lucha. Sangre de hacía años, manchaba la pared de un color ya marronáceo oscuro. Y algo así como garras de alguna antigua bestia, se clavaban a uno y otro lado del pasillo, revelando lo que allí había podido pasar. Pero seguía sin entender los muertos en la parte principal, si bien su muerte parecía más bien a causa de algún tipo de magia... ¿Y si se hubieran sacrificado para derrotar a la bestia?
Dejando posibles hipótesis, seguí en dirección a la habitación del sumo sacerdote. Esperaba encontrar el Acero, y por qué no, algunas respuestas de lo sucedido.
Re: Forja de una espada II
Llegas a unas habitaciones lleno de cadáveres putrefactos pero lo que te llamo la atención de aquel lugar es una bestia con tres garras en cada una de sus cuatro manos y tres pies, no tenia cabeza ni ojos y un gran boca con muchos dientes y varias ileras de estas.
Había un cadáver sosteniendo una daga en el lugar donde debería de estar el cuello. La criatura estaba lastimada pero sin rasgo alguno de putrefacción.
No hacia falta mirar, todos aquellos cadáveres fueron hechos por aquella criatura, te adelantas dejando a Vikina atrás, esta se enoja y quiere ir con vos, la tomas de una mano y la dejas atrás, algo dolida de su orgullo se queda donde esta y te acercas a la bestia. No se movía y aquella daga era el acero primigenio que venias a buscar.
Había un cadáver sosteniendo una daga en el lugar donde debería de estar el cuello. La criatura estaba lastimada pero sin rasgo alguno de putrefacción.
No hacia falta mirar, todos aquellos cadáveres fueron hechos por aquella criatura, te adelantas dejando a Vikina atrás, esta se enoja y quiere ir con vos, la tomas de una mano y la dejas atrás, algo dolida de su orgullo se queda donde esta y te acercas a la bestia. No se movía y aquella daga era el acero primigenio que venias a buscar.
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Re: Forja de una espada II
AXWELL ISSEN
Tras llegar a los aposentos del sumo sacerdote, pude comprobar lo que parecía ser el culpable de todos aquellos cadáveres. Un monstruo, quizás un demonio, estaba inerte en medio de la habitación. Lo grotesco de sus rasgos hizo que me girara hacia Vikina, y le vetara la entrada.
Eso es más de lo que necesitas ver. Entraré sólo. y ante las protestas de la So, añadí No es que no sepa que puedes ayudarme Vikina, pero sabes que no me permitiría que fueras dañada... espera aquí, por favor. Será un momento terminé por decir, y me acerqué hasta el cadáver de la criatura.
Clavado en el cuerpo estaba lo que andaba buscando; una daga de acero primigenio. Pero el hecho de que estuviera unida al monstruo me hizo ser muy cauteloso al cogerla. Me acerqué lentamente, agudizando todos mis sentidos, por si aquella criatura no estaba tan muerta como parecía.
OR: Si no hay ningún conflicto que resolver, cuando tenga la daga nos marchamos en busca del siguiente ingrediente, esta vez iré a robar la cuchara de una posada Saludos!
Tras llegar a los aposentos del sumo sacerdote, pude comprobar lo que parecía ser el culpable de todos aquellos cadáveres. Un monstruo, quizás un demonio, estaba inerte en medio de la habitación. Lo grotesco de sus rasgos hizo que me girara hacia Vikina, y le vetara la entrada.
Eso es más de lo que necesitas ver. Entraré sólo. y ante las protestas de la So, añadí No es que no sepa que puedes ayudarme Vikina, pero sabes que no me permitiría que fueras dañada... espera aquí, por favor. Será un momento terminé por decir, y me acerqué hasta el cadáver de la criatura.
Clavado en el cuerpo estaba lo que andaba buscando; una daga de acero primigenio. Pero el hecho de que estuviera unida al monstruo me hizo ser muy cauteloso al cogerla. Me acerqué lentamente, agudizando todos mis sentidos, por si aquella criatura no estaba tan muerta como parecía.
OR: Si no hay ningún conflicto que resolver, cuando tenga la daga nos marchamos en busca del siguiente ingrediente, esta vez iré a robar la cuchara de una posada Saludos!
Última edición por Isildur el 02 Nov 2008, 13:22, editado 1 vez en total.
Re: Forja de una espada II
Aclaracion: La daga esta clavada en la criatura
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Re: Forja de una espada II
OR: Perdon por el lapsus, ya he modificado mi post
Re: Forja de una espada II
Tomas la daga lentamente de la criatura, no parecia moverse, te acercas a Vikina y dices.
- Problema solucionado.
- ¡¡¡¡¡Cuidado!!!!
Te empuja con gran fuerza a un costado, fuerza sobrenatural dada por sus poderes y ves como un garra pasa por tu lado impactando en Vikina seccionándole el brazo derecho, ella simplemente ve como sangraba, te mira y se desmaya, la criatura había despertado.
Tu reccion es inmediata y trabas combate con la criatura desplegando todo tu poder divino, pero tu arma era inútil contra ella así que comienzas a luchar con la daga.
Estabas en desventaja, te golpea con el puño tirandote contra la pared haciéndote saber el sabor de tu propia sangre, tu clavas nuevamente la daga en la criatura y empujas y comienzas a rajarla, esta te rasguña gravemente pero tu sigues el camino abriéndola hasta que negra sangre comienza a manar a borbotones y la criatura se convierte finalmente e en un montón de hojas.
- Un So, esa criatura era un So.- Gritas, vuelves a Vikina y ella esta perdiendo su temperatura rápidamente y la sangre que manaba no paraba, usas tus habilidades curativas pero no puedes hacer nada, ves como su brazo caído se convierte en plata y luego comienza a convertirse en plata de la parte seccionada hasta ella.
- Amor, no quiero morir, detén esto, por favor, detenlo???.
Todo se vuelve en blanco y negro y ves un figura encapuchada que aparece con una guadaña y se para a los pies de ella, ya sabes, era la muerte, dejas a Vikina en el suelo y la atacas. Con un simple giro de su guadaña parte en dos. Quieres golpearla con el puño pero toma tu mano y con un movimiento de su brazo te golpea el antebrazo y te lo quiebra dejadote arrodillado en el suelo, escucha su voz y nunca la olvidaras.
- No vine para luchar entupido mortal, vine para proponerte un trato, la vida de tu mujer Vikina por la de tu hijo por nacer, si aceptas me darás a tu jijo cuando cumpla ocho años sin replicar ni quejarte, si no aceptas mira como me llevo a tu mujer.
- Problema solucionado.
- ¡¡¡¡¡Cuidado!!!!
Te empuja con gran fuerza a un costado, fuerza sobrenatural dada por sus poderes y ves como un garra pasa por tu lado impactando en Vikina seccionándole el brazo derecho, ella simplemente ve como sangraba, te mira y se desmaya, la criatura había despertado.
Tu reccion es inmediata y trabas combate con la criatura desplegando todo tu poder divino, pero tu arma era inútil contra ella así que comienzas a luchar con la daga.
Estabas en desventaja, te golpea con el puño tirandote contra la pared haciéndote saber el sabor de tu propia sangre, tu clavas nuevamente la daga en la criatura y empujas y comienzas a rajarla, esta te rasguña gravemente pero tu sigues el camino abriéndola hasta que negra sangre comienza a manar a borbotones y la criatura se convierte finalmente e en un montón de hojas.
- Un So, esa criatura era un So.- Gritas, vuelves a Vikina y ella esta perdiendo su temperatura rápidamente y la sangre que manaba no paraba, usas tus habilidades curativas pero no puedes hacer nada, ves como su brazo caído se convierte en plata y luego comienza a convertirse en plata de la parte seccionada hasta ella.
- Amor, no quiero morir, detén esto, por favor, detenlo???.
Todo se vuelve en blanco y negro y ves un figura encapuchada que aparece con una guadaña y se para a los pies de ella, ya sabes, era la muerte, dejas a Vikina en el suelo y la atacas. Con un simple giro de su guadaña parte en dos. Quieres golpearla con el puño pero toma tu mano y con un movimiento de su brazo te golpea el antebrazo y te lo quiebra dejadote arrodillado en el suelo, escucha su voz y nunca la olvidaras.
- No vine para luchar entupido mortal, vine para proponerte un trato, la vida de tu mujer Vikina por la de tu hijo por nacer, si aceptas me darás a tu jijo cuando cumpla ocho años sin replicar ni quejarte, si no aceptas mira como me llevo a tu mujer.
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Re: Forja de una espada II
AXWELL ISSEN
Sustraje la daga sin más problemas, y por suerte la criatura no se levantó... O eso creí. Vikina me alertó a tiempo, apartándome del alcance de las temibles garras del monstruo, que fueron a impactar en el brazo de ella, que se separó de su cuerpo, dejándome la sangre helada.
¡¡Vikinaaaaaa!! grité enfurecido, mientras ella caía al suelo, perdiendo la consciencia por el shock.
Me enfrenté a la criatura con mi espada, usando los poderes adquiridos como Hijo de Él. Pero los impactos de mi hoja le producían el mismo efecto que si hubiera golpeado a roca viva. Él me golpeó con fuerza, y reboté en la pared de la habitación, mientras la sangre salía por la boca debido al tremendo impacto.
Me limpié la sangre con el reverso de mi mano, mientras tomaba con firmeza la daga extraída. Me abalancé contra el monstruo, y la daga tuvo que clavarse en su cuerpo varias veces antes de que dejara de vivir. Recibí un par de cortes más con sus garras, pero por suerte no eran profundos.
Corrí a ayudar a Vikina, pero incluso usando mis poderes no podía hacer nada. Su brazo se convirtió en plata... era algo que no comprendía.
¡¡Aguanta!! ¡¡No dejaré que mueras!! grité desesperado, viendo como su vida se esfumaba por momentos.
Con lágrimas en los ojos, ví aparecer la muerte, que venía a tomarse la vida de Vikina. No podía quedarme sin hacer nada. Traté de combatirla, pero era inútil. Era incorpórea, y no tenía manera de tocarla siquiera.
Su proposición me dejó algo perplejo... ¿darle mi hijo? Pero si no lo hacía, Vikina moriría allí y ahora, y tal hijo jamás llegaría a nacer...
Yo... está bien... acepto... ¡salva su vida! dije con los ojos húmedos por las lágrimas, y la rabia de sentirme culpable de su situación.
Sustraje la daga sin más problemas, y por suerte la criatura no se levantó... O eso creí. Vikina me alertó a tiempo, apartándome del alcance de las temibles garras del monstruo, que fueron a impactar en el brazo de ella, que se separó de su cuerpo, dejándome la sangre helada.
¡¡Vikinaaaaaa!! grité enfurecido, mientras ella caía al suelo, perdiendo la consciencia por el shock.
Me enfrenté a la criatura con mi espada, usando los poderes adquiridos como Hijo de Él. Pero los impactos de mi hoja le producían el mismo efecto que si hubiera golpeado a roca viva. Él me golpeó con fuerza, y reboté en la pared de la habitación, mientras la sangre salía por la boca debido al tremendo impacto.
Me limpié la sangre con el reverso de mi mano, mientras tomaba con firmeza la daga extraída. Me abalancé contra el monstruo, y la daga tuvo que clavarse en su cuerpo varias veces antes de que dejara de vivir. Recibí un par de cortes más con sus garras, pero por suerte no eran profundos.
Corrí a ayudar a Vikina, pero incluso usando mis poderes no podía hacer nada. Su brazo se convirtió en plata... era algo que no comprendía.
¡¡Aguanta!! ¡¡No dejaré que mueras!! grité desesperado, viendo como su vida se esfumaba por momentos.
Con lágrimas en los ojos, ví aparecer la muerte, que venía a tomarse la vida de Vikina. No podía quedarme sin hacer nada. Traté de combatirla, pero era inútil. Era incorpórea, y no tenía manera de tocarla siquiera.
Su proposición me dejó algo perplejo... ¿darle mi hijo? Pero si no lo hacía, Vikina moriría allí y ahora, y tal hijo jamás llegaría a nacer...
Yo... está bien... acepto... ¡salva su vida! dije con los ojos húmedos por las lágrimas, y la rabia de sentirme culpable de su situación.
Re: Forja de una espada II
Ella sonríe, la muerte sonríe. Busca el brazo y lo coloca nuevamente en su lugar. Mientras canturreaba una canción de cuna y conectaba cada uno de los nervios miraba de reojo al paladín. Luego se separa toma la espada y la une también.
- Recuerda, a los ocho años me darás en sacrificio un hijo tuyo?? y no intentes jugar con la muerte, porque de mi nadie escapa, ni tu padre escapara.
Los colores vuelves y Vikina toma una gran bocanada de aire. Con sus pulmones llenos de vida de abraza y sientes su suave pelambre sobre tu armadura.
- Amor, que paso, me siento.-Expira todo el aire, vuelve a tomar aire.- Extraña
- ¿Te sientes enferma?.- Le preguntas mientras le acaricias la cara.
- Enferma no, extraña.- Allí ella te besa con pasión y tu le respondes con fogosidad para terminar los dos arrodillados y abrazados en el suelo.
La llevas en alzas ya que ella no podía caminar bien, se sentía mareada, pasas por los pasillos y ves los cadáveres y ella te abraza apartando la mirada diciendo.
- Te amo.- Directamente a tu oído.
Bueno, ya sabes como continua esto, eliges el lugar, me das los parámetros de este, tienes libre reacción de los pnjs, solamente que Vikina, por alguna razón que no sabe explicar no quiere separarse de ti..
- Recuerda, a los ocho años me darás en sacrificio un hijo tuyo?? y no intentes jugar con la muerte, porque de mi nadie escapa, ni tu padre escapara.
Los colores vuelves y Vikina toma una gran bocanada de aire. Con sus pulmones llenos de vida de abraza y sientes su suave pelambre sobre tu armadura.
- Amor, que paso, me siento.-Expira todo el aire, vuelve a tomar aire.- Extraña
- ¿Te sientes enferma?.- Le preguntas mientras le acaricias la cara.
- Enferma no, extraña.- Allí ella te besa con pasión y tu le respondes con fogosidad para terminar los dos arrodillados y abrazados en el suelo.
La llevas en alzas ya que ella no podía caminar bien, se sentía mareada, pasas por los pasillos y ves los cadáveres y ella te abraza apartando la mirada diciendo.
- Te amo.- Directamente a tu oído.
Bueno, ya sabes como continua esto, eliges el lugar, me das los parámetros de este, tienes libre reacción de los pnjs, solamente que Vikina, por alguna razón que no sabe explicar no quiere separarse de ti..
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Re: Forja de una espada II
AXWELL ISSEN
Por suerte, la muerte cumplió su promesa y devolvió a Vikina a la vida. Sus últimas palabras, recordándome que debía entregarle a mi hijo cuando este cumpliera ocho años, me hicieron suspirar tímidamente y asentir aún a mi pesar.
Pero tenía tiempo por delante, quizás hubiera alguna manera de poder romper esa promesa.
Almenos, Vikina volvió en sí, aunque estaba débil y no podía andar bien. La tomé en brazos, tras coger la daga de plata primigenia, y salimos lentamente de aquél lugar maldito. Cuando ella me susurró "Te amo" en el oído, no pude hacer otra cosa que besarla de nuevo. Había estado a punto de perderla, así que mis ojos se humedecieron, a punto de llorar.
Te amo Vikina... dije tras el beso, y caminando hacia la salida.
1 litro de tu sangre
1 litro de la sangre de alguien en quien confíes, que sea mujer y este dispuesto a dártelo y que no tengas ningún tipo de relación sanguínea.
½ litro de sulfuro de demoñillo
Oro primigenio
Plata Primigenia
Acero Primigenio
Una rosa robada de la tumba de un villano
Una cuchara robada de una taberna
El suspiro de un moribundo
Y como ultimo elemento 1 litro de mercurio que crece allí donde no debería.
Bien, contando con mi sangre y la de Vikina, ya sólo faltaban tres elementos. La cuchara era fácil de conseguir, así que tocaba decidir entre el "suspiro" o el "mercurio". Pero, ¿cómo capturar el suspiro de un moribundo?
¿Te encuentras bien? Quizás deberías volver al bosque a descansar... el próximo objetivo es "el suspiro de un moribundo", pero ¿cómo podemos conseguir eso? Quizás, mi padre... dije pensativo.
Por suerte, la muerte cumplió su promesa y devolvió a Vikina a la vida. Sus últimas palabras, recordándome que debía entregarle a mi hijo cuando este cumpliera ocho años, me hicieron suspirar tímidamente y asentir aún a mi pesar.
Pero tenía tiempo por delante, quizás hubiera alguna manera de poder romper esa promesa.
Almenos, Vikina volvió en sí, aunque estaba débil y no podía andar bien. La tomé en brazos, tras coger la daga de plata primigenia, y salimos lentamente de aquél lugar maldito. Cuando ella me susurró "Te amo" en el oído, no pude hacer otra cosa que besarla de nuevo. Había estado a punto de perderla, así que mis ojos se humedecieron, a punto de llorar.
Te amo Vikina... dije tras el beso, y caminando hacia la salida.
1 litro de tu sangre
1 litro de la sangre de alguien en quien confíes, que sea mujer y este dispuesto a dártelo y que no tengas ningún tipo de relación sanguínea.
½ litro de sulfuro de demoñillo
Oro primigenio
Plata Primigenia
Acero Primigenio
Una rosa robada de la tumba de un villano
Una cuchara robada de una taberna
El suspiro de un moribundo
Y como ultimo elemento 1 litro de mercurio que crece allí donde no debería.
Bien, contando con mi sangre y la de Vikina, ya sólo faltaban tres elementos. La cuchara era fácil de conseguir, así que tocaba decidir entre el "suspiro" o el "mercurio". Pero, ¿cómo capturar el suspiro de un moribundo?
¿Te encuentras bien? Quizás deberías volver al bosque a descansar... el próximo objetivo es "el suspiro de un moribundo", pero ¿cómo podemos conseguir eso? Quizás, mi padre... dije pensativo.